• Estrategias.
La crítica
situación por la que atraviesa la ganadería de Baja California Sur a llegado a
graves extremos por la falta de lluvias.
Es por ello
la gran preocupación del gobernador de Baja California Sur, Víctor Manuel
Castro Cosío quien ha ordenado que se tomen medidas urgentes.
De esta
manera y con el fin de amortiguar la problemática se busca la aplicación de
cuatro medidas estratégicas viables.
La primera de
ellas que se emita una declaratoria de emergencia por sequía severa para el
estado.
En la segunda
persiste la presentación de un plan estratégico para mitigar las consecuencias
de la sequía, con una inversión inicial de 10 millones de pesos y trabajando en
coordinación con la Unión Ganadera Regional para apoyar a ganaderos.
En la tercera
se destaca iniciar la siembra de forraje en campos ubicados el municipio de
Comondú.
Y en la
cuarta que se considere al Estado como zona de desastre ante la falta de
lluvias, al no existir precipitaciones en verano, y tampoco se presentaron las
equipatas esperadas, todo esto ha empeorado la situación.
En lo que se
refiere al primer punto, la senadora de la república Susana Zatarain García a
través de un escrito enviado a la mesa directiva sometió a la consideración de
esa Soberanía la Proposición con Punto de Acuerdo de Urgente Resolución por el
que se exhorta a la Titular del Ejecutivo Federal para que emitir la
Declaratoria de Emergencia para el Estado de Baja California Sur por la sequía.
Lo anterior
con el propósito de que se puedan acceder a los recursos para la atención de
emergencias por desastres naturales.
Por otro lado
en lo que se refiere a la aplicación de 10 millones de pesos, esto se hará en
una acción conjunta con la Unión Ganadera Regional.
En cuanto a
la siembra de forraje para enfrentar la sequía recurrente el gobernador detalló
que “ya estamos sembrando ahora 20 hectáreas, vamos a sembrar más, pero yo
espero que tengamos unas 30 mil toneladas de alfalfa para finales de junio,
principios de julio y poder distribuirlas gratuitamente”.
En lo que
hace al último punto, el gobierno del Estado solicitará a la Presidenta de la
República, que se considere a Baja California Sur como zona de desastre ante la
falta de lluvias.
No es para
menos.
Justamente
por la falta de lluvias persisten al menos dos aspectos importantes que están
afectando grandemente el desarrollo regional.
Uno de ellos
es la mortandad de ganado que se está presentado en distintas regiones.
Y el otro, de
vital importancia es que la sequía ha provocado escasez de agua, afectando no
solo a las ganaderías, sino lo que es peor a las comunidades.
Ahora bien,
la preocupación persiste pues a decir del propio el gobernador, Víctor Manuel
Castro Cosío, “conforme avanzan los meses, las complicaciones son mayores para
los rancheros sudcalifornianos debido a la sequía”.
Incluso
abundó: “estamos en una condición que se va agravando paso a paso”.
Y a raiz de
lo anterior agregó que solicitará a la Presidenta de la República “que nos eche
la mano, que nos considere como desastre”.
Lo
sobresaliente es que Castro Cosío reconoció la necesidad de garantizar que
estas acciones sean permanentes para que el Estado esté preparado con
suficiente alimento para hacerle frente a las temporadas de sequía, como la que
actualmente afecta al sector ganadero.
En resumen,
pese a lo que se diga el gobernador de Baja California Sur está consciente de
la gravedad de la sequía.
Y derivado de
ello está tomando medidas urgentes para mitigar sus efectos.
Eso es lo
importante.
Cuestión de
tiempo.