• Por irregularidades millonarias niegan aprobación de la cuenta pública del 2023 al anterior Ayuntamiento de Loreto. • La entonces alcaldesa panista Paola Cota Davis no sustentó observaciones por el orden de 263 millones 569 mil 617 de pesos. • La alcaldesa morenista de Paz de Alma Ochoa está empeñada en devolver la confianza ciudadana al ayuntamiento loretano.
Uno de los históricos bastiones del
PAN sudcalifornianos fue durante muchos años el ayuntamiento de Loreto, hasta
que en las elecciones locales pasadas, Morena lo derrotó con amplio margen y
desde entonces, se conocieron las verdaderas y contaminadas entrañas
administrativas de este nivel de gobierno.
Refugio para negocio particular de
algunos destacados panistas, el ayuntamiento de Loreto que encabezó, Paola Cota
Davis, no pudo responder adecuadamente a las exigencias de un pueblo loretano
que reaccionó con negarles finalmente su voto.
Una campaña encabezada por la ahora
alcaldesa, Paz del Alma Ochoa, regresó a los loretanos la posibilidad de
obtener un mejor servicio desde ese ayuntamiento.
Obviamente los excesos finalmente se
reflejaron en el desprecio de una comunidad como la loretana que finalmente se
decidió a negarle su sufragio a las propuestas del blanquiazul.
Hoy en día ese organismo político
blanquiazul en esa importante región de Baja California Sur, tal como en gran
parte de la entidad se encuentra muy desacreditado y cada día más desvinculado
de la comunidad.
Una muestra de esas irregularidades,
es la conclusión a la que llegó el Congreso del Estado de no aprobar las
cuentas públicas de año 2023 que reflejó precisamente la mala calidad
administrativa que encabezó la entonces alcaldesa Paola Cota Davis a quien
ahora le pesan las observaciones no solventadas por el orden de 263 millones
569 mil 617 pesos.
¿Cómo es posible que en el
ayuntamiento más pequeño de la entidad se registren presuntas irregularidades
por esa cantidad de dinero?
Además, como si el detalle fuera
menor, aún existen exfuncionarios de ese periodo municipal que han demandado
altas liquidaciones económicas con fundamentos dudosos para que el actual
ayuntamiento también les pague precisamente porque ya no fueron recontratados.
Obviamente no tendrá cara el PAN ni
las principales figuras del panismo loretano para ir otra vez al contacto
directo con el ciudadano a pedir una vez más que se les otorgue el voto en las
futuras contiendas electorales.
Por supuesto habrá que ver si las
autoridades respectivas, establecen acciones judiciales que permitan dejar en
claro dónde quedó esa cantidad millonaria que las autoridades del Congreso han
dejado en evidencia y que por ello le han negado la aprobación a esa cuenta
pública que se refiere al año 2023.
Ya veremos en dónde termina este
asunto que puede derivar incluso en que se conozcan los nombres de proveedores
y personajes ligados al recurso municipal que administraban los panistas
loretanos.
Por lo pronto la alcaldesa Paz del
Alma Ochoa hace su tarea de responder a la comunidad en donde se incluye
precisamente dejar en claro de qué manera se aplicaron los recursos públicos
municipales durante la administración pasada que encabezó la panista Paola Cita
Davis y que con el voto popular le tocó relevar.
Ya veremos qué sucede.