• En la cuerda floja.
A estas
alturas en que la lumbre le llega a los aparejos, Rubén Muñoz Álvarez, trae la
cola entre las patas.
Y por mas que
voltea su mirada para todas partes, no encuentra la puerta de salida. Y tampoco
logra conciliar el sueño.
No es para
menos. Aquellos, sus antes aliados monstruos mitómanos ahora lo asustan, le
causan sobresaltos y lo traicionan por las noches. Entonces, por mas vueltas
que se da en la cama, no encuentra paz.
Y es que sabe
que la solicitud de desafuero como diputado federal solicitada por, aún sigue
pendiente.
Así es. Se
trata de aquel documento a través del cual le d cuando fue presidente
municipal.
Como también
sabe que para seguir disfrutando de fuero, le quedan solo algunos días. De tal
manera que no sabe ni para dónde arrancar.
Lo que sí es
un hecho, es que por ese caso tan caliente y que despide pútridos olores, Rubén
Muñoz trae la piola enredada. hasta el cuello. Y no creo que la hoy presidenta
electa, Claudia Sheinbaum, esté dispuesta a meter las manos para quemarse.
Además mal
haría la virtual presidenta cuando sabe que Rubén Muñoz, en febrero de 2023 la
dejó con un palmo de narices.
En efecto,
recuérdese que en ese mes y año, la entonces jefa de gobierno de la ciudad de
México le pidió a Rubén que fuera su enlace en Nuevo León
Y en efecto,
el entonces diputados federal por BCS acató la orden y se fue a Nuevo León.
Pero lo hizo por tan solo unos días porque después Rubén Muñoz, le dejó tirado
el paquete bajo el señuelo de conseguir una Senaduría por nuestro estado.
Cuya
Senaduría, por supuesto no logró, y todo por ese gran pecado que había
cometido.
Pero allí
sigue Rubén Gregorio dando tumbo tras tumbo.
Allí sigue
dando tropiezos y desaciertos a los que pareciera ya se ha acostumbrado y que
tuvieron sus orígenes cuando despidió masivamente a aquellos funcionarios de su
administración cuando fue presidente municipal de La Paz.
Y ahora, a
estas alturas del partido, Rubén Muñoz Álvarez, ha tenido el descaro de
aventurar que las acusaciones que se le hacen, y si así fuera es porque él se
lo buscó.
Y claro, esas
sus autodefensas se antojan como declaraciones aberrantes cuando todos
concedemos el beneficio de la duda a un acto como ese, que a todas luces emana
tufaradas de corruptelas y perversidad.
Incluso,
entre las voces pueblerinas hay quienes le ponen sabor a untadas, sobornos, y
acuerdos por debajo de la mesa.
Pero en ese
afan de defender lo indefendible, Rubén va más allá, diciendo que afirmando él
y los demás ediles que se han enredado en esa telaraña, eron.
En síntesis,
Rubén, a su tiempo, debió haber acudido a responde esa solicitud del Fiscal
Anticorrupción y a estas alturas ya estuviera avanzado el asunto que se ventila
en su contra. Pero dejó todo para lo último, y allí están las consecuencias.
Lo
verdaderamente cierto es que ese caso, por estar tan lleno de lodo, no es nada
transparente.
Por tanto,
corresponderá a la autoridad limpiarlo.
Pero, por lo
pronto, Rubén muñoz Álvarez, que no deja de ser su principal protagonista,
continúa en la cuerda floja.
Y ya veremos
si cae o se levanta.
Cuestión de
tiempo.