Muy buenos días estimable Lector, gracias, muchas gracias por continuar prefiriendo este su Diario El Independiente.
Inicio esta
columna comentando a Usted; Hoy los gobiernos Federales, Estatales, y Municipales
tienen el deber de comprometerse, revalorar y respetar la conciencia histórica
de la Nación, como parte de la diversidad cultural y pluralidad política,
social y económica a las etnias y grupos indígenas, considerándolos parte de
nuestra identidad nacional, respetando su esencia para enriquecer la conciencia
histórica de los pueblos.
Ya es tiempo
de luchar por más respeto a los derechos y a la cultura de nuestros hermanos
indígenas, que la verdad hasta hoy no solo ha sido ignorada, sino también
lastimada y avasallada. Los gobiernos tienen que reconocer que entre los
indígenas todo es prioritario ya que en la gran mayoría de sus comunidades su
forma de vida actualmente es infrahumana. Considero que en cada Estado y
Municipio deben reivindicarlos, abanderando sus causas de desarrollo integral
en lo social y económico, que tengan presente que es una exigencia la
aplicación del convenio 2169 de la Organización Internacional del Trabajo
celebrado en Ginebra, Suiza, y que el Gobierno Federal firmo como primer País
latinoamericano a favor de la defensa de los Derechos y Culturas Indígenas.
Bajo este
contexto; Es urgente de parte de nuestras autoridades respetar a las etnias
indígenas, en el marco de la legalidad y en sus formas de Gobierno, conforme a
sus usos y costumbres. Pugnen por una ciudadanía a plena para que haya equidad
de género que les permita participar en los tres niveles de Gobierno. Difundir
en su lengua materna el marco legal que nos rige, para informar especialmente a
las mujeres y niñas indígenas, con el objetivo de que conozcan la Ley y no se
sigan violentando sus Derechos Humanos, civiles laborales y agrarios entre
otros. Y en este sentido combatir eficazmente la violencia y discriminación de
que son objeto en sus propias comunidades y en zonas urbanas.
Por lo tanto,
el gobierno Federal tiene que asumir en consecuencia; que la pobreza la
desigualdad y la carencia de oportunidades para todos los mexicanos, son los
principales problemas sociales que deben atenderse desde los ámbitos de lo
público y el ejercicio de la política. El pueblo mexicano reconoce que es
necesario revisar el entramado jurídico-político, que rige los mecanismos de
apropiación y distribución de la riqueza en nuestro País, en aras de poner un
freno a un sistema económico imperante, que de suyo general exclusión, pobreza
y marginación. el pueblo afirma que mediante una “Nueva Política Social”
podremos avanzar en el mejoramiento de las condiciones en que viven todas y
todos los mexicanos.
Concluyo:
Cuando me refiero a personas implico plenamente que se trata de sujetos de
Derecho; indígenas, mujeres, niñas, niños, jóvenes, personas con discapacidad y
de la tercera edad, y ciudadanos en general, amparados por la Constitución que
legítimamente debe acceder al goce de las garantías siendo derechos que
consagran nuestras Leyes.