• "Nosotros pensamos que nos vamos a recuperar pronto", dijo el mandatario
Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López
Obrador expresó que disentía de las proyecciones del Banco de México de
una caída sustancial del Producto Interno Bruto, aunque respetaba la autonomía
de la institución.
Mas adelante ironizó: “Los pronósticos del
Banco de México están peor que los pronósticos del Fondo Monetario
Internacional para México, salieron mas ‘realistas’ que los del Fondo”.
"Nosotros pensamos que nos vamos a
recuperar pronto", dijo el mandatario en su conferencia matutina.
Sin embargo, reconoció que en semanas pasadas
hubo salidas de capitales, particularmente de aquellos que estaban colocados en
fondos de inversión “que van a refugiarse en otros países”, como Estados Unidos
o Japón.
Aseveró que ya están regresando las
inversiones, por lo cual el peso se ha apreciado paulatinamente pues llegó a
depreciarse hasta el 25 por ciento y en la actualidad, en el momento más
dificil de la pandemia, sólo está alrededor de 10 por ciento por abajo del
nivel en que se recibió al comenzar la administración.
“Todas las monedas se devalúan, quedan muy
pocas sin devaluarse, por eso se deprecia el peso”, aunque llegó a estar como
una de las primeras, señaló.
Por otro lado, pidió a los legisladores
aprobar la iniciativa que permitirá modificar el tema de los fideicomisos,
porque actualmente están regados “como 250 mil millones de pesos”.
Señaló que “no se van a quedar sin apoyos los
cineastas, los investigadores, no. Nada más que de otra manera, de manera
directa, sin estos instrumentos de intermediación administrados por gente sin
escrúpulos, eso es lo que estamos planteando, poner orden”.
En otro orden de ideas, señaló que se avanza
en la integración del nuevo indicador de medir el bienestar, distinto del
Producto Interno Bruto. No significa que este instrumento vaya a desaparecer
por decreto, “pero no quiere decir que estamos de acuerdo con sus sofismas”.
No se va a dejar de tomar en cuenta "si
es el principal instrumento de medición de los organismos financieros
internacionales”, pero se creará este otro mecanismo que mida el bienestar de
la gente.
Si no les gusta este nuevo instrumento de
medición, no hay problema, “ellos van a seguir midiendo y todos vamos a seguir
tomando en cuenta el PIB, pero hasta los creadores del PIB niegan que sea
correcto medir asi el desarrollo. No se trata sólo de generar la riqueza, se
requiere la distribución del ingreso (…)", dijo el presidente.
Agregó que "el esquema nuestro es
totalmente opuesto a ese dogma de que si les va bien a los ricos, les va a ir
bien a los pobres. Es mejor si le va bien a los pobres le va ir bien a los
ricos, si fortalecemos la capacidad de consumo de los pobres, les va a ir bien
a industriales, comerciantes".