Cabo San Lucas (CSL), Baja California Sur.- Históricamente, la red municipal de agua potable y alcantarillado en Los Cabos, ha ido colapsando poco a poco, pero cada vez peor, al ser muy antigua y obsoleta para las actuales necesidades de la ciudad. El sistema, que en su mayoría data del año 1970 a la fecha, ha sido rebasado y no soporta los caudales que hoy pasan por ductos y tuberías.

Sin embargo, la ciudadanía no tiene el mínimo interés en justificar el por qué se derrama tanta agua potable si escasea en la ciudad, ni si las lluvias son las culpables que el sistema de drenaje y alcantarillado colapse en un lugar diferente todos los días. En la última semana, en el puerto de Cabo San Lucas, vecinos reportaron a través de redes sociales y medios de comunicación, fugas de agua limpia, pero también problemas con el agua potable. 

Una de las fugas importantes ocurrió en la colonia El Arenal, en donde vecinos, piden a la autoridad, tener mejor control de la presión cuando envían el agua, pues esto, pudo ocasionar la ruptura.

“Se derramó mucha agua, varias horas, demasiadas familias se pudieron beneficiar con esa agua, pero no, se tiró, se hizo lodo, y en algunos lados ya son pozas para que los zancudos crezcan, nos piden que cuidemos eso, pero ni la autoridad pone el ejemplo, entonces ¿que hacemos?”, declaró el señor Floriberto Garzón, habitante de la zona. 

En el tema de drenaje y alcantarillado, los problemas de vertido continúan en la colonia Matamoros, y colonia Miramar, en Cabo San Lucas. 

La señora Adriana López, comentó, “Dicen que van a limpiar el canal, pero a cada rato cae drenaje, está todo colapsado, huele mal y hasta la cabeza duele, es un foco de infección espantoso y preocupante. No se puede vivir así, con esta peste a caca. Es muy molesto”. 

Peor aún, si bien, autoridades municipales a través del Organismo Operador del Agua Potable y Alcantarillado (Oomsapas), Obras Públicas y hasta los Servicios Públicos, atienden los reportes ciudadanos, esto de nada sirve, pues generalmente las reparaciones quedan a medias; los baches se tapan con tierra, las reparaciones de agua potable y alcantarillado dejan calles rotas, y en el caso de las fugas, el agua perdida socava las calles de terracería.