Hoy retomo un tema tal vez polémico y escabroso, donde, como lo dije hace algún tiempo, el extremismo y el fanatismo, son altamente nocivos para el ser humano.

Y son peores aún en lo que se refiere a la religión.

Por supuesto que para ilustrar el tema de hoy haré alusión nuevamente a un tipejo maligno que llegó al grado de llamarse “El Apóstol de Cristo”.

Su nombre: Naasón Joaquín García, lider de la Iglesia La Luz del Mundo.

Y retomo el caso porque se le están cargando nuevos delitos graves, a tal grado que, incluso, fue detenida también la madre de este Eva García, por tráfico sexual.

Inicialmente a este sujeto le habían implicado nada menos que 19 cargos judiciales por abuso sexual de menores, violación, posesión de pornografía infantil y tráfico de personas.

Ahora, le incluyen: Conspiración de crímen organizado, tráfico sexual y explotación infantil.

En efecto.

Y ahora la acusación también incluye cinco presuntos cómplices, entre ellos la madre del propio líder, de 80 años, y su sobrino, Joram Núñez Joaquín, de 37, ya detenidos.

El detenido es acusado de formar parte de una red de tráfico sexual que funcionó durante años a ambos lados de la frontera, entre México y Estados Unidos.

Los otros imputados son Rosa Sosa, Azalia Rangel García y Silem García Peña, todos prófugos de la justicia.

Ahora bien, debo dejar en claro que con la entrega de hoy, no pretendo defender a alguna religión sino dejar en claro que quien cometa un delito, sea quien sea, se castigue conforme a la ley.

Porque pareciera que ningún líder de ninguna religión es capaz de lanzar la primera piedra, y porque la gran mayoría de ellos cocinan sus almas en la hoguera del infierno.

Y es que las sotanas diabólicas manchadas de sangre inocente las he observado entre Pastores Cristianos y Curas Católicos.

Los patéticos casos de ellos, especialmente de enriquecimiento y de abusos sexuales, se cuentan por miles.

Y si escribí que no es mi intención defender a religión alguna es cierto. Y para ello traeré el caso de un sacerdote católico ya fallecido, llamado Marcial Maciel fundador de los Legionarios de Cristo quien nació en 1920.

Fue el tipejo que hizo escuela en estos casos de abuso sexual. Es más, para darnos ideas de las aberraciones de este ser demoníaco diré que abusó sexualmente de 60 menores, según lo revelado por esa congregación.

Este argumentaba que padecía una extraña enfermedad que solo los niños podían ayudarle a curar y entonces les decía que requería de una muestra de su semen para un examen especial además de un “ayudante” para extraérselo.

Claro que sabía que, al tener autoridad moral, cualquier menor haría lo que él les pidiera y así lograba su satisfacción sexual.

Sin embargo, no alcanzaría este espacio para citar a tantos tipejos que han cometido aberrantes crímenes.

En síntesis, nadie se explica cómo casos tan impactantes y tan escalofriantes, pueden tener cabida en sujetos que son capaces de darse golpes de pechos en sus templos sin el más mínimo temor a Dios.

Tampoco hay explicación del fanatismo y la idolatría de muchos otros que defienden a estos tipejos que cometen blasfemia.

Y peor todavía en lo que se refiere a Naasón Joaquín García, pues en este caso específico, aunque usted no lo crea, los congregantes de La Luz del Mundo defienden la “santidad” de este tipo.

Más aún, la feligresía se atreve a decir que el escándalo contra su líder por producción y posesión de pornografía infantil es una “Prueba de Fe”.

Lo malo de todo esto es que la negación y el silencio siempre han estado presentes en estos detestables hechos.

Así Pues, que las tinieblas del infierno los cobije y no La Luz del mundo.

Cuestión de tiempo.