• La organización afirma que fue una imposición política mal ejecutada, pero con serias reper-cusiones en las instituciones y que permea en la inversión y confianza como país.
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Estado de
México. - La baja asistencia y el desinterés generalizado en la primera
elección judicial del país confirman que no nació de una exigencia social, sino
de una imposición política mal ejecutada, pero con serias repercusiones en las
instituciones y que permea en la inversión y confianza como país, afirmó la
Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex)
El INE
informó anoche que la participación en la elección en la que se eligieron
jueces, magistrados y ministros fue del 13%, según cálculos estadísticos.
En el caso de
la votación para ministros y ministras de la Suprema Corte, a las 18:00 horas
de este lunes y con el 76.5% de las actas computadas, la participación
ciudadana era del 11.7%.
“Con una
primera estimación oficial de cerca de 13% de participación y 62% del PREP
avanzado, la elección judicial de ayer sería la menos
participada de la historia moderna”, expuso en un reporte el área de análisis
económico del grupo financiero Banamex.
Coparmex
afirmó que se trató de un proceso que no atiende las verdaderas necesidades del
sistema de justicia ni garantiza el fortalecimiento institucional que México
requiere.
“Nuestra
posición es clara: Esta elección no puede convertirse en el nuevo modelo para
futuros procesos electorales”, sostuvo en un comunicado anoche.
La cúpula
patronal agregó que esta elección judicial no debe sentar precedentes para
justificar recortes presupuestales, reducir
el número de casillas “que solo debilitaron la logística electoral” o exigir a
las autoridades electorales la organización de una elección con poco tiempo.
La Coparmex
aseguró que las condiciones observadas en la jornada electoral atentan contra
la verdadera democracia, los derechos de los ciudadanos e incluso contra la
independencia de los órganos electorales.
Apuntó que
sus observadores electorales dieron cuenta de irregularidades que “comprometen
seriamente la legitimidad del proceso y ponen en evidencia su fragilidad”.
“A lo largo
de la jornada generamos más de mil reportes y documentamos una baja
participación ciudadana, retraso en la instalación de casillas, violencia en
algunas casillas y
hasta compra
de votos en algunos municipios”, aseveró.
“En diversas
casillas se reportó el uso de ‘acordeones’ y mecanismos para inducir el voto,
lo que confirma la falta de garantías para un ejercicio auténticamente libre y
razonado”, agregó.
Señaló que
los próximos días seguirá sistematizando los hallazgos exhibidos y dará
seguimiento al cómputo distrital, a fin de identificar y denunciar cualquier
anomalía adicional que pudiera surgir.
Sostuvo que
cada vez más empresas transnacionales optan por recurrir a tribunales
internacionales para resolver sus controversias, abandonando la jurisdicción
mexicana ante la falta de confianza en la justicia local.
Manifestó que
el impacto más severo lo enfrentarán las micro, pequeñas y medianas empresas,
que quedarían desprotegidas frente a un sistema judicial politizado o
ineficiente.
Añadió que
trabajará en una propuesta de reforma judicial construida con base en criterios
técnicos, buenas prácticas internacionales y la participación de expertos,
organizaciones sociales y actores del sector productivo.