• Extraviada y errática dirigencia de Rigo Mares, el PAN de Baja California Sur, da verdaderos tumbos. • Perdido y sin dirección definida, Mares Aguilar heredó los negativos de Lupita Saldaña y ahora ambos, están en la larga espera de ligar candidaturas para 2027. • Para simpatizantes del PAN local e incluso a nivel de militantes, muchos pasan por una evidente decepción y un profundo desencanto.
Este asunto
del desarticulado PAN sudcaliforniano.
Ahora bajo la
extraviada y errática dirigencia de Rigo Mares, el PAN de Baja California Sur,
da verdaderos tumbos.
Irrefutables
palos de ciego.
No han podido
armar una propuesta competitiva y de verdadero arrastre popular.
No es para
manos.
Luego de la
muy fallida dirigencia de la exsenadora y ahora diputada local Lupita Saldaña,
el blanquiazul ya tiene rato estancando.
Y bajo la
patética dirigencia del moreliano Rigo Mares, va por la misma ruta.
Perdido y sin
dirección definida, Mares Aguilar heredó los negativos de Lupita Saldaña y
ahora ambos, están a la larga espera de ligar candidaturas para el próximo
proceso electoral del 2027.
Por supuesto
que la seca militancia del partido azul, ya lo sabe.
Pero víctimas
del autoengaño y del cobro de una pírrica quincena, ahí siguen a la espera de
que el tiempo haga lo suyo.
Mientras
tanto en la entidad existe un clima político que bien podría ser aprovechado
por este partido que gobernó dos administraciones estatales y que tal parece
que ya no quieren regresar a la senda del, triunfo.
Por las
mismas, limitadas y cuestionadas acciones del blanquiazul es que se fortalece
la lucha interna entre los partidos integrantes de la 4T. Afuera no tendrán
mucho que pelear, la verdadera contienda político-electoral será interna.
Así que para
simpatizantes del PAN local e incluso a nivel de militantes, muchos pasan por
una evidente decepción y un profundo desencanto.
Está claro
que Rigo Mares y sus escasos fieles seguidores, muchos de ellos convertidos
ahora en verdaderas comparsas, tendrán que hacer algo más que ir a tomar café a
sus oficinas estatales.
Obviamente
eso está por verse, pues la sospechosa tibieza e indolencia del excandidato a
la alcaldía paceña, no son nada atractivas para ciudadanos que esperan mayor
compromiso, definición y combatividad política que la registrada hasta ahora.
Desde luego
todo puede cambiar, aunque eso, por supuesto, aún está por verse.
¿No le parece
así amable lector?