El segundo informe de actividades del presidente municipal de La Paz, Rubén Muñoz se presentó el pasado martes en un momento en el que la circunstancia política lo coloca ante la posibilidad de ser el candidato de Morena a la gubernatura, por supuesto tendrá primero que enfrentarse a los esfuerzos evidentes que realiza el ahora exdelegado de la Secretaría de Bienestar, Víctor Castro. Ambos se encuentran como principales competidores a la principal candidatura política en la entidad.

Muñoz Álvarez ha enfrentado los serios problemas que históricamente registra la capital sudcaliforniana, la adecuada distribución de agua, que según se ha dicho, existe suficientes litros del vital elemento, pero el problema radica en el sistema de red que a estas alturas de la vida paceña, está completamente obsoleto, sobre todo en el centro, en la zona vieja de la capital.

Los problemas que se han tratado de atajar en materia de iluminación y recolección de basura han sido efectivamente acciones que aún no alcanza el cien por ciento de atención pero que definitivamente se ha trabajado al respecto, aunque donde parece haber mejores resultados es en el tema de la seguridad.

La Paz es una de las ciudades con mejor percepción de seguridad ciudadana a nivel nacional.

Por supuesto que el alcalde paceño tiene la habilidad política adecuada para realizar una lucha interna en su partido en donde hasta ahora y de acuerdo a las encuestas más recientes, se encuentra literalmente en empate técnico con Castro Cosío que ahora tendrá que utilizar toda su astucia y habilidad política para promover su propia propuesta sin violentar la ley, ahora sin la plataforma natural que podría representar el ser ex titular de la Secretaría de Bienestar a nivel local.

Desde luego que ponerse como meta que la ciudad de La Paz, se convierta en una ciudad como las que existen en Suiza es ponerse la vara muy en alto, sobre todo por el poco tiempo que le queda ya a la actual administración porque existe además ya un tiempo electoral que empieza a ejercer presión sobre todos los actuales representantes populares y no se diga sobre los diversos alcaldes que conforman la entidad.

Está claro que aún está por verse cómo se desenvolverá el alcalde paceño desde la plataforma municipal sobre todo con esa lucha interna en su partido que recientemente renovó su dirigencia nacional y que hasta ahora esa nueva presidencia no ha indicado cómo se realizará la nominación de las diferentes candidaturas.

Como quiera que sea, es evidente que Muñoz Álvarez, logró hasta ahora algo que parecía difícil de alcanzar: La posibilidad real de ser el abanderado de Morena a la gubernatura mediante una competencia frente a frente a Víctor Castro Cosío quien hasta hace muy poco era el potencial único pre-candidato morenista al gobierno estatal de la media península.

Dentro de tres semanas inicia formalmente el proceso electoral a nivel estatal y la gestión entre los aspirantes de los diversos partidos aumenta sobre todo ahora que la pandemia por Covid-19 afecta directamente a una población que primero tendrá que decidir entre cuidar su salud y el bienestar de sus respectivas familias antes que salir a expresar su apoyo por cualquiera de los actuales aspirantes a ganar las elecciones del año que entra.

Ya veremos cómo el segundo informe del alcalde paceño puede ser capitalizado en términos de presencia ciudadana a pesar de los detractores naturales y por supuesto de una intensa campaña que se vive al interior de Morena, espacio donde los principales adversarios de sus líderes son precisamente los morenistas.

Ya veremos.