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Hoy es miercoles, 24 de abril de 2024

Reconoce COEPRIS que medidas de reapertura confunden a ciudadanos y comerciantes

“La vida es primero que la economía”, pero las medidas cambian, aún en el semáforo naranja, dijo la encargada de la prevención de riesgos

Reconoce COEPRIS que medidas de reapertura confunden a ciudadanos y comerciantes

La Paz, Baja California Sur.- Mientras pide paciencia, la Comisión Estatal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (COEPRIS) realiza cambios en la lista de actividades que confunden al sector comercial. La ciudadanía no entiende, o se confunde, con los cambiantes protocolos que estableció el gobierno del estado para evitar el contagio de COVID-19 mientras abren progresivamente más actividades no esenciales. 


Esto de acuerdo a la propia comisionada estatal Bianca Pulido Medrano, quien dijo que en el sector salud “tenemos presión por todo mundo”. 


Y es que la propia funcionaria confesó que, al decidir qué giros comerciales abrirían “para nosotros fue difícil designar cuáles sí y cuáles no” durante esta etapa de alerta entre rojo y naranja: el “5 crítico”, activo desde el 26 de junio en la entidad. 


Estacionados en el semáforo bermejo por casi veinte días, la presión de los sectores comerciales se deja sentir. 


Y es que un día sí y otro también propietarios de gimnasios, de agencias turísticas, actividades religiosas, centros de lavado de automóviles, puestos taquerías y “haterías”, estéticas y barberías plantean y a veces exigen a las autoridades el regreso a las actividades que les dan sustento a cientos de familias. 


Ante la autoridad estatal ha tomado decisiones que confunden a la ciudadanía, aquí tres casos que evidencian la confusión y provocan riesgos sanitarios innecesarios. 


El caso de confusión 1: Los gimnasios 

En respuesta a la presión de una manifestación de propietarios de gimnasios de todo el estado, la autoridad estatal determinó reabrir ciertos gimnasios bajo condiciones particulares lo cual generó confusión. 


A pesar de estar en una etapa donde los gimnasios no debían estar abiertos, se determinó una excepción, pero nada más 5 gimnasios presentaron una solicitud formal para reiniciar operaciones. “Una fue autorizada, he recibido cuatro de La Paz por verificarse” informó la directora de Coepris en una entrevista a los medios de comunicación. 


“Aquí se confundió cuando dijimos que había la anuencia en gimnasios pues hubo la apertura de todos”, admitió la propia doctora Pulido. 


Mientras solo se permitiría reabrir sus puertas a “establecimientos al aire libre” el día que se hizo el anuncio, la propia doctora Bianca Pulido admitió que “todos los gimnasios abrieron” lo cual tuvo que provocar acciones de suspensión de actividades de los negocios no autorizados. 


“Esto es muy lamentable” dijo la autoridad estatal que asume que los sudcalifornianos escuchan los mensajes que emite la Secretaría de Salud. 


El caso de confusión 2: Las taquerías 

Cuando se presentó el semáforo naranja, se permitió la apertura de restaurantes con un aforo no mayor de 30% de su capacidad instalada y un protocolo que debía ser suscrito a las autoridades sanitarias para su aprobación. 


El día llegó y los restaurantes abrieron, pero también las taquerías y otros puestos semifijos de comida callejera que, sin problema alguno habían estado abiertos -con servicio para llevar- durante la etapa más “crítica” de confinamiento domiciliario. 


Abrieron los tacos de carnitas, abrieron los tacos de pescado, este Diario reportó la apertura de los burritos de la universidad en una nueva localización. 


Pero solo, esto también fue una confusión, pues solo pueden seguir ofreciendo alimentos para comer legos del establecimiento, mientras que solo los restaurantes pueden tener comensales en sus mesas. Aquí los puestos al aire libre (contrario al caso de los gimnasios) no están admitidos. Los tacos regresan al servicio para llevar o se atienen a posibles sanciones. 


Caso de confusión 3: Lavados de autos 

De acuerdo a los lineamientos del semáforo “5 crítico” no está permitido que un particular lave un auto en un establecimiento. 


Y mientras tu pareja y tú hacen tiempo para entrar al supermercado (separados pero juntos) en los estacionamientos de estas tiendas de conveniencia cobran 60 pesos por el lavado de auto. 

A los “car wash” del estado les están aplicando todo el rigor. 


“Tengo los citatorios hasta mayo” dijo el propietario de un local de lavado de autos en Loreto entrevistado para este diario “pero ya no me dejan abrir y no me dan citatorio, somos siete lavados de autos que estamos establecidos en Loreto, pagamos impuestos, les damos mascarillas a los morros, los clientes no nos miran, solo dejan el auto, son como 35 familias que dependen de estos negocios” dijo al pedir un espacio en las páginas de Diario El Independiente para pedir clemencia a las autoridades. 


“¿Cuál es el riesgo si uno se la pasa envuelto en jabón en este trabajo?” se pregunta, el señor Rigoberto. Quien ya tenía todo listo para abrir pero le cerraron el local de nuevo. 


“mientras los morros en la calle como si nada, sin mascarilla limpian el carro sin problemas” no entiendo de qué se trata. 


La confusión no ayuda a cuidarnos, y además de estos casos hay muchos más, pescadores, prestadores de servicios turísticos. 


“Entendemos la afectación económica que estamos provocando” dijo la doctora Pulido Medrano quien ya anuncia que actividades acuáticas y terrestres serán permitidas sin riesgo de transmisión. 

“Debemos ser cautelosos en liberar actividades económicas, está primero la salud que la cuestión económica de nuestra población”.