• Se actuará conforme a la ley, dijo al ratificar que en la consulta a las comunidades indígenas votaron en mayoría a favor de la construcción.
Ciudad de México
Tras confirmarse que a finales de abril
iniciarán las obras de dos tramos del Tren Maya, el presidente Andrés Manuel
López Obrador aseguró que no habrá empresas favoritas y se actuará conforme a
la ley, al ratificar que en la consulta a las comunidades indígenas, “la
mayoría de la gente votó a favor de la construcción”.
En la conferencia de prensa en Palacio
Nacional, Rogelio Jiménez Pons, director del Fondo Nacional de Fomento al
Turismo, informó que el 22 de enero se realizó un taller informativo, con la
participación de 85 empresas nacionales internacionales, donde se dieron a
conocer los aspectos del proyecto.
López Obrador también garantizó que se cuidará
el patrimonio arqueológico. “Queremos el crecimiento con bienestar y sin
destruir el territorio. Estamos a favor del desarrollo sustentable, no es
crecer por crecer. Liberalismo es dejar hacer, dejar pasar. El neoliberalismo
es lo mismo con más barbaridad. Nosotros ya no queremos eso”, subrayó.
Sostuvo que afortunadamente eso ya se ha ido
entendiendo y no hay empresas favoritas, como las españolas Repsol u OHL, que
hicieron “negocios jugosos al amparo del poder público por influyentismo” u
OHL.
Contó que esta última se quedo con obras,
aunque había mejores propuestas. “Recuerdo el caso del segundo piso del
viaducto del estado de México, donde dejaron fuera a una empresa porque su
proyecto arquitectónico no tenía calidad artística, aunque los precios eran
mejores, pero afectaba el paisaje urbano.
“Otra fue peor: la mejor opción era una
empresa de Carlos Slim y la descartaron con el argumento de que la empresa no
tenía solvencia económica, aunque parezca increíble, porque la obra se la
querían dar a OHL. Eso ya no”. En este gobierno, resaltó, el Estado de derecho
es muy importante. “Piso parejo”.
El presidente señaló que la política de
favorecer a empresas la impuso Carlos Salinas de Gortari “En pocas palabras, el
salinismo como política fue lo que se impuso después de Salinas. El Fobaproa
después con (Ernesto) Zedillo fue con la misma concepción… Todavía no se
termina de pagar esa enorme deuda pública, pero es una concepción. ¿por qué no
se rescató al pueblo, a campesinos, trabajadores, clases medias?”.
Insistió que con Vicente Fox también hubo
entrega de bienes y “con (Felipe) Calderón lo mismo”. También recordó que
cuando concluyeron sus sexenios, Zedillo se fue a trabajar a la empresa -Union
Pacific-, que se benefició con la privatización del sistema ferroviario, y
Calderón se convirtió en consejero de Iberdrola. “Yo me voy a ir a Palenque,
terminando”.