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La nueva cinta de Spider-Man ya está en los cines. La película protagonizada por Tom Holland es una secuela directa de Avengers: Endgame y está ambientada ocho meses después de la batalla final entre Thanos y los Vengadores. Sin embargo, Far From Home podría haber creado un agujero de guion en el filme de los hermanos Russo.

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En su segunda película en solitario, Peter Parker hereda un par de gafas de su mentor Iron Man, un poderoso artilugio que le da acceso a una avanzadísima tecnología de vigilancia y defensa con drones. Este par de gafas llamadas E.D.I.T.H. (Even Death, I'm The Hero, es decir, "Hasta muerto soy el héroe) son las mismas que Tony Stark llevaba en Infinity War.

Es asumible pensar que la tecnología de E.D.I.T.H. no estaba creada en el momento en el que Eboy Maw y Cull Obsidian invadieron Nueva York en busca de la Gema del Tiempo, en posesión del Doctor Strange. De hecho, no sería de extrañar que estas gafas fueran creadas por Tony Stark en respuesta a la devastación de Thanos y la Orden Negra o incluso al temible chasquido del Titán Loco.

Así, en algún momento del 'Blip', el personaje diseñó el programa de vigilancia insertado en las gafas. Debido a que el sacrificio de Iron Man ocurre durante Endgame, E.D.I.T.H. tuvo que ser creada al mismo tiempo que el ataque a los cuarteles de los Vengadores durante la película, pues, de haber sido creada anteriormente, Tony Stark hubiera usado esta tecnología para combatir a las huestes de Thanos.

Esta discrepancia entre ambas películas es algo que se explicaría teniendo en cuenta que fueron diferentes equipos los que trabajaron en Endgame y Far From Home.

La última película de Spider-Man, ya en cines, cierra, no sin incongruencias, la Fase 3 del MCU y pone las bases para el futuro marvelita, que anunciará nuevos títulos de su cuarta fase este verano.

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