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Hoy es jueves, 2 de mayo de 2024

No "pudieron" detectarle cáncer durante 4 años en el H. Salvatierra

El urólogo habría diagnosticado “prostatis” desde sus primeras molestias en 2013; en 2017 le informó que “salió” con cáncer de próstata y se negó a operarlo por "viejo"

No "pudieron" detectarle cáncer durante 4 años en el H. Salvatierra

La Paz, Baja California Sur.- Sentado en la sala de su casa el hombre de 74 años se veía cansado, molesto y tenía la mirada sin miedo, esa que caracteriza a quienes se atreven a denunciar las injusticias ante la opinión pública.


El señor de nombre Vicente Zuluaga Zamora, vecino de la colonia Guerrero, en La Paz, Baja California Sur (BCS) relató su experiencia con el cáncer de próstata para Diario El Independiente.


Sobre todo su relación con el urólogo que le atendió, Jorge Alberto Beltrán Minjares, de quien describió una serie de inconsistencias al atenderlo como derechohabiente del “Seguro Popular”.


No "pudieron" detectarle cáncer durante 4 años en el H. Salvatierra


El veterano doctor que atendía en el Hospital General con Especialidades Juan María de Salvatierra, ahora es acusado de negligencia médica por diagnósticos equivocados.


Vicente observaba el horizonte en las paredes de su casa, buscando la mejor forma de contar su historia y soltó que este problema de salud se remonta desde el año 2013


Tras un primer resultado por encima del parámetro de la proteína conocida como antígeno prostático específico (APE), el urólogo advirtió una “prostatis”.


“Para él fue una prostatis, para lo cual me recetó levofloxacino de 500 mg, que me tomara uno cada 12 horas por 2 meses y siguió monitoreándome”, dijo el afectado.


No "pudieron" detectarle cáncer durante 4 años en el H. Salvatierra


“Hasta el mes de julio de 2016, que salió alto el estudio y me dice el doctor, te voy a hacer la prueba de tacto rectal, el cual llevó a cabo con una risita muy sarcástica”, señaló molesto.


Expuso que después de haber sido revisado por Beltrán Minjares de manera rectal, dijo que el galeno le señaló precipitadamente que “todo” estaba “bien”, sin detectar lo que a la postre,  resultó cáncer.


Fue hasta octubre de 2017 que los niveles de APE subieron tanto, que al realizarle una biopsia se reveló el temido diagnóstico: el cáncer de próstata.


“Saliste con cáncer, me dijo. Cuando le pregunto qué sigue, me dice que hay 3 opciones, una operarme y quitar la próstata, otra radiaciones y la otra con un tratamiento natural”, señaló.


No "pudieron" detectarle cáncer durante 4 años en el H. Salvatierra


“Me dice que la radiación no hay quien me la de aquí, que el tratamiento es muy costoso y que la operación no me la podía hacer porque estoy muy viejo”, acusó al galeno.


Mientras platicaba su relación con el urólogo del Hospital Salvatierra, Vicente cada vez más torna su plática más dura, como si cada palabra doliera al salir de su boca.


“Te doy un mes para que lo pienses, me dijo, en lugar de haberme dado una solución y no lo hizo, pues busqué otra opinión”, expuso.


Fue así como abandonó el Seguro Popular y pidió a una de sus hijas afiliarlo al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) para ser atendido.


No "pudieron" detectarle cáncer durante 4 años en el H. Salvatierra


“Me dijeron que me tenía que dar un tratamiento, que esto no era un juego y se tenía que retirar la próstata, ya que la edad no tenía nada qué ver y la radiación se tenía que realizar de igual modo”, expuso Vicente.


Fue hasta el 7 de marzo de 2018 que se extirpó la próstata y comenzó una terapia de radiación en Guadalajara, Jalisco.


“Allá en Guadalajara me preguntaron si era novato el urólogo tras revisar los diagnósticos desde 2013, pero no, es una persona mayor igual que yo, pocos años menos”, contó Vicente.


“Desde el 2013 se podía detectar la lesión de cáncer con una tomografía y mandarla congelar para terminar mi problema y sacar la próstata sin radiaciones”, expuso.


Señaló haber gastado “de su bolsa” más de 40 mil pesos en hospedaje y traslados, a pesar de que el ISSSTE cubrió los boletos de avión.


“Estaba en un error todo lo que había hecho conmigo este amigo. Tantito más y no la estuviera contando porque se hubiera salido el cáncer de la próstata y se hace una metástasis”, dijo.


Dijo haber tenido la intención de demandar al médico, pero al revisar el historial médico emitido por la Secretaría de Salud (SSa), constató que venía en términos “muy confusos”.


“No tenía nada que ver con lo que hizo, pedí otra y dije lo que quería específicamente y venía con la leyenda que dice ‘Esto no avala para un asunto legal’ por lo que decidí exhibirlo en medios locales”, dijo el afectado.


Expuso que tras haber investigado, el urólogo ya no estaría trabajando en el Hospital Salvatierra por una jubilación.


“Le llevaba un sobre con un escrito, se lo quería entregar en su mano a ver qué me decía, que lo leyera para decirle otras cosas más personalmente”, dijo Vicente enojado.


“Pero no, se lo dejé en el escritorio del consultorio. Para esta fecha ya deben haberle hablado”, expuso.


Dijo haber tenido diversas complicaciones pero señaló haber vencido al cáncer de próstata gracias a los médicos del ISSSTE.


Señaló que por la falta de una Comisión de Arbitraje Médico en BCS, este tipo de casos se han vuelto cada vez más frecuentes.


“No se ha consolidado aquí, ya ves la autoridad cómo está aquí de corrupta, te imaginas”, dijo.


Por ello prefirió evitar una demanda legal por daño moral, ya que las instituciones “protegen” a los médicos que dan malos diagnósticos, escudados en la noble profesión de la medicina.


“¿Cuánto dinero no me hubiera quitado un abogado? Y con miras al 100 por ciento a perder el pleito. Era como ponerse con Sansón a las patadas”, advirtió el señor.


“Quiero exhibirlo porque no quisiera que otros compañeros, amigos, conocidos o simplemente la comunidad, pasen por lo mismo”, dijo Vicente.


Al relatar su experiencia, dijo que el urólogo Beltrán Minjares “es de esos médicos que no levantan la vista al atender”.


“Yo cuando alguien me saluda y se agacha, como que no confío mucho ¿O no? ¿Por qué no te miran de frente? Esconde lo que uno pueda ver en la mirada, se lo esconden a uno”, dijo.


Dijo no contar con ingresos y haberse desempeñado en su vida como trabajador de la construcción, “ya nadie lo ocupa a uno por la edad”, se quejó.


“Tuve que vender un pick up que tenía para poder sufragar este gasto. Aquí conmigo viven 2 nietas y mi esposa”, señaló.


Para mantener a su familia se dijo beneficiario de las pensiones para adultos mayores que entrega la Secretaría del Bienestar del Gobierno de México.


“Ahora le subieron de perdida al doble para pagar el teléfono, luz y agua. Y buscamos pues detallitos ahí, de ahí buscarle aquí le buscamos la manera cómo sobrevivir a la economía”, finalizó.