La inclusión en la lista de candidatos plurinominales del PRI de quien se supone estarian concentrados en impulsar los esfuerzos de los candidatos de este partido en la entidad, puso prácticamente en estado de indefensión a los aspirantes a las alcaldías y diputaciones locales del tricolor en la entidad.

Efectivamente que los senadores Isaías González y Ricardo Barroso aparecieran en la lista de candidatos a diputados federales plurinominales, así como de la presidenta estatal de este organismo, Gabriela Cisneros, simplemente evitará que estos personajes se metan a fondo a la actividad proselitista de este organismo político pues por baja que resulte la votación, lo más seguro es que sí resulten electos.

La queja ya conocida por muchos de los candidatos a las alcaldías y a las diputaciones locales y federales de mayoría, así como de las diversas estructuras del PRI por la falta de apoyo de los líderes de este organismo político, se agudizó luego de conocerse que estos actores políticos mencionados no tendrán que hacer mayor esfuerzo para quedar finalmente posicionados tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados.

Esta situación que golpea directamente a la dinámica interna del PRI y de los propios candidatos locales, se suma al alto desprestigio que repunta ante la opinión pública sudcaliforniana, luego de la detención del exalcalde de La Paz y militante priista, acusado por el uso abusivo de funciones y que tiene que ver con el presunto mal uso de alrededor de ocho millones de pesos.

En el colmo del cinismo existen algunos que suponen que la autoridad se extralimitó al detener a exalcalde sin embargo, algunos parecen olvidar que estos fue resultado de una auditoría forense en donde por supuesto también se encuentra inmiscuida la ahora diputada priista Esthela Ponce Beltrán que ha tratado a toda costa de hacer creer que no existen denuncias en su contra.

Por supuesto que la suerte de Francisco Monroy no es la misma que la de Esthela Ponce, pues mientras que el exalcalde tuvo que pagar una fianza por 4.3 millones de pesos para recuperar su libertad, Ponce Beltrán se ha apegado al fuero de su cargo y por la evidente omisión del tema de la PGR donde existen averiguaciones previas abiertas en su contra por el presunto desvío de recursos públicos, aún se mueve bajo una impunidad que raya en el cinismo.

Obviamente la seguridad de que los mencionados personajes sean candidatos plurinominales y puedan irse a sus respectivas casas a ver de lejos el desarrollo de la campaña política y el descrédito en el que ahora se encuentra el tricolor que se agudiza con la detención de Francisco Monroy, no favorece en absoluto la búsqueda del tricolor por convencer a la población de que son la mejor opción para ser representantes populares durante los próximos tres años.

Queda claro que además del desaliento que ahora viven los priistas locales sumado al descrédito social, la desconfianza ciudadana es definitivamente un elemento que golpeará de frente a las propuestas del tricolor que pasa por uno de sus peores momentos.

Las campañas federales inician dentro de nueve días y las locales dentro de poco más de un mes y hasta ahora en el tricolor no se ve por dónde puedan salir a flote los diversos candidatos del PRI que tendrán que hacer un esfuerzo enorme para salir del pantano en el que ahora se encuentran.

Ya veremos.