En ocasiones no cuentan con el recurso para comprar agua a las pipas que recorren las colonias, y con el calor a cuestas se ven obligados a sobrevivir varios días sin el vital líquido

San José del Cabo, Baja California Sur.- A medida que van incrementando las temperaturas, familias que padecen el problema de acceso a la red de agua potable deben lidiar más todavía con la necesidad de  conseguir el vital líquido para cubrir algunas de los quehaceres del hogar.

Conscientes de que por la zona en la habitan no están considerados dentro de los planes de desarrollo del municipio, lo que los condena a vivir sin servicios básicos como agua potable y alcantarillado, la manera en que la mayoría de familias asentadas en zonas  irregulares  obtiene  el vital líquido es a través de “pipas”.

De acuerdo con la encuesta de opinión que realizó Diario El Independiente, no todos los habitantes corren con la misma suerte de poder llenar cubetas u otro tipo de recipientes, ya que en muchas ocasiones no cuentan con el recurso para comprar agua y se ven obligados a sobrevivir varios días sin el vital líquido. Asimismo,  coincidieron que durante la temporada de calor el consumo de agua es mucho mayor, y está debe utilizarse en las principales necesidades que surgen en el día como aseo personal y lavar trastes.

“En otra época del año la necesidad de tener agua es de las principales que hay, ahora que viene el verano pues le sufrimos más, tener agua es la mayor necesidad. Obtenemos agua con pipas, pero no siempre pasan por la colonia, a veces estamos desesperados porque se sufre mucho la escasez” expuso la señora Laura Ortíz, de 59 años de edad, ama de casa.

Por su parte, Guadalupe, de 32 años de edad, también ama de casa, señaló: “En verano se batalla todavía más. El hecho de que entre una pipa no te garantiza que siempre vas a tener agua, si el agua se escasea en la ciudad, la pipa va a tardar en venir. Gasto entre cien y ciento cincuenta a la semana en agua, en época de calor ese gasto pues se duplica y el agua dura menos”.

En el mismo orden de ideas, Alicia Torres, de 34 años de edad, opinó: “Es soportar el fuerte calor y la falta de agua, más cuando se tienen niños. Llenamos unos tambos que tenemos y de ahí estamos agarrando agua para cuatro o cinco días, es lo que nos dura. El principal uso es para bañarnos, lavar trastes y ropa”.