• Arturo de la Rosa y Francisco Pelayo, alcaldes acelerados por candidaturas del 2018 • Necesaria precaución política para evitar fracturas y desgastes innecesarios • Tampoco en política por mucho madrugar amanece más temprano

Mientras que la población espera que las autoridades municipales cumplan con su compromiso de otorgar servicios públicos de calidad a poco más de un año de ser electas, los alcaldes de Comondú y Los Cabos han evidenciado de manera muy clara sus pretensiones de alcanzar una diputación federal o una senaduría en las elecciones del 2018, aunque por desgracia ponen en riesgo justamente su responsabilidad de atender adecuadamente sus respectivos municipios. En La Paz resulta diferente ya que Armando Martínez está concentrado en hacer su labor en esta capital que a final de cuentas de cualquier manera los resultados de ello será lo que finalmente determinen si tendrá posibilidad de alcanzar alguna candidatura. La ciudadanía está muy desconfiada en términos generales de la actividad política por lo que los servidores públicos actuales tienen que calcular muy bien cuándo salir a la calle a expresar sus aspiraciones futuras antes de concluir adecuadamente con su actual responsabilidad. Ese es el caso de los alcaldes de Los Cabos y Comondú, Arturo de la Rosa y Francisco Pelayo, respectivamente, que están más preocupados por las candidaturas que se disputarán para las elecciones del 2018, que por sacar adelante su labor como presidentes municipales. Obviamente primero tendrán que hacer bien la tarea que hoy tienen encomendada antes de expresar aspiraciones como lo están haciendo apenas a un año de asumir su responsabilidad como alcaldes. Por supuesto que cuando la ambición es grande y la obsesión mayor, resulta muy complicado para este tipo de políticos desenvolverse con la prudencia necesaria para evitar que la población los observe como acelerados. No es el caso hasta ahora de Armando Martínez en la Paz, que no ha externado interés por candidatura alguna a futuro antes de concluir con su labor como presidente municipal. Queda claro, cada vez más, que los abanderados del PAN serán los candidatos que en la entidad tendrán más posibilidades de obtener la victoria electoral sobre todo con el descrédito al que ahora está sometido el PRI por las recientes medidas económicas del gobierno federal. Por ello al interior de blanquiazul se agudiza la lucha por esas futuras candidaturas donde la dirigencia de ese partido tendrá que tener especial cuidado para evitar fracturas innecesarias. Los presidentes municipales, así como el resto de los representantes populares primero tendrán que quedar bien con la población en general antes de distraer tiempo y energía en candidaturas futuras si lo que se pretende es no abonarle a ese clima de desconfianza que la comunidad refleja cada vez con más claridad. Valdría la pena recordarles a los alcaldes cabeño y comundeño que no por mucho madrugar amanece más temprano. ¿No le parece así amable lector?