• Tres niñas denunciaron a un cura español por realizarles tocamientos cuando acudía a confesarlas a un albergue de Jalisco.
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Estado de México. - La
justicia española aprobó la extradición a México del
español Ramón L.E, un cura acusado de agredir
sexualmente a tres niñas en
un albergue de Jalisco, donde actuaba como misionero y acudía a
confesar a las menores.
La Audiencia Nacional española
aprobó la extradición en un auto dictado el pasado mes de octubre, que adelantó
el periódico local El Confidencial y
al que tuvo acceso EFE.
Este sacerdote católico, de 58
años y misionero desde el 2001, fue reclamado por las autoridades mexicanas
después de que tres menores, dos de ellas
hermanas, denunciaran que el párroco les
hacía tocamientos cuando acudía
a confesarlas al albergue cristiano en el que residían
durante la primavera del 2022.
Cuando sufrieron los
presuntos abusos estas niñas tenían 13, 12 y 10 años y
residían en Jalisco, en un albergue que se dedica al cuidado de niñas en
situación vulnerable.
Las menores denunciaron las
agresiones tras saber que el cura había regresado a España.
Todas ellas relatan cómo el
cura las conducía a la sala donde estaba la televisión, donde las agredía
sexualmente cuando se encerraba con ellas para confesarlas. En uno de los casos
las agresiones empezaron cuando la niña tenía 9 años, según declaró la víctima.
Una de las niñas contó durante
su declaración que no había alertado de lo ocurrido porque pensó que no la iban
a creer y que solo comunicó lo que había pasado una vez que lo hicieron otras
niñas; además, cuando lo hizo, una de las religiosas a cargo del albergue la
acusó de ser una mentirosa.
El sacerdote, sobre el
que pesaba una orden de arresto de un juez mexicano desde julio de 2023,
fue detenido el pasado 28 de marzo en Zaragoza (ciudad del
noreste de España de la que era originario), ante un aviso de Interpol, y tras
una primera vista fue puesto en libertad provisional, con medidas
cautelares.
Durante la vista de
extradición celebrada en la Audiencia Nacional el pasado mes de octubre, el
párroco dijo que no aceptaba la extradición y su defensa sostuvo que el cura se
encontraba en España en las fechas de las agresiones sexuales denunciadas, por
lo que no había podido cometerlas.
La Fiscalía apoyó en cambio
extraditarle a México, donde está acusado de abuso sexual
infantil y de corrupción de menores agravados, una petición que
también apoyó la Audiencia Nacional, que apunta que el tribunal de extradición
no puede entrar a valorar cuestiones de fondo como las pruebas o la veracidad
de los cargos formulados contra el cura.
El tribunal español descartó
acogerse a la posibilidad de que el sospechoso fuera juzgado por
videoconferencia, para facilitar el enjuiciamiento de los graves hechos
presuntamente cometidos en México, donde están la totalidad de las pruebas y
las víctimas, de corta edad y “especial vulnerabilidad”.