• Legisladores Jorge Martín Escogido y Lourdes Cornejo señalan que los protocolos ya existen y deben actualizarse sin vulnerar derechos de niñas, niños y adolescentes.
La Paz, Baja California Sur.—
Los diputados Jorge Martín Escogido y Lourdes Cornejo, integrantes de la
Comisión de Asuntos Educativos del Congreso del Estado, afirmaron que la
revisión de mochilas —popularmente conocida como “operativo mochila”— no es una
solución definitiva a los riesgos dentro de los planteles, y que las
instituciones deben apostar a acciones preventivas y no reactivas.
Ambos legisladores
participaron en las mesas de trabajo convocadas por la diputada Teresita
Valentín para analizar la propuesta de reforma al artículo 20 Bis de la Ley de
Educación estatal. La iniciativa busca dar mayores atribuciones a la Secretaría
de Educación Pública para formalizar, actualizar y revisar los protocolos de
actuación ante el ingreso de armas, objetos punzocortantes o estupefacientes en
escuelas.
Escogido explicó que las mesas
reunieron a autoridades educativas de niveles básico y medio superior,
organismos de derechos humanos, Poder Judicial y legisladores, aunque reconoció
que faltó mayor participación de madres y padres de familia. Subrayó que este
es apenas el inicio de una discusión que debe incluir a todos los actores
involucrados.
El diputado recordó que la
Suprema Corte de Justicia ha establecido criterios claros: los protocolos no
deben ser invasivos ni vulnerar la intimidad de niñas, niños y adolescentes.
“Debemos ser muy cuidadosos. Si un menor considera que su intimidad está siendo
vulnerada, no podemos actuar más allá”, señaló.
Por su parte, la diputada
Lourdes Cornejo apuntó que el reciente caso de un alumno que ingresó un arma a
una primaria en La Paz fue el detonante para revisar nuevamente la legislación,
pero insistió en que los protocolos ya existen, y el reto ahora es aplicarlos y
actualizarlos.
Ambos legisladores
coincidieron en que las mesas de análisis mostraron posturas encontradas entre
docentes, directivos y padres de familia; sin embargo, prevaleció la idea de
que la verdadera solución está en la prevención desde el hogar y en la actualización
integral de los marcos protocolares, no en medidas que puedan vulnerar
derechos.
“La recomendación de la
Suprema Corte y de la CNDH es clara: debemos privilegiar acciones preventivas,
no reactivas”, enfatizó Escogido.