La Paz, Baja California Sur.- Península de los Sueños es un megaproyecto turístico-inmobiliario que busca instalarse a 50 kilómetros de la ciudad de La Paz, en la delegación de Los Planes, al noroeste de México. La obra amenaza con afectar la biodiversidad y la playa Punta Arena, y con ello, el estilo de vida de los pescadores de la comunidad de Agua Amarga.

El proyecto recibió la autorización ambiental de Alfonso Flores, director general de Impacto y Riesgo Ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en el 2016.

La resolución determinó 20 años para la preparación y construcción del proyecto, pero han pasado nueve años sin que inicien las obras formales y ahora que restan 11 años para aún materializarlo los promoventes han iniciado una campaña de relanzamiento del proyecto.

·        Afectaciones a la biodiversidad

A 13 kilómetros de Punta Arena se encuentra la comunidad de Agua Amarga, conformada por unas 600 personas que aunque no viven frente al mar, tienen una gran conexión con él. La mayoría de sus habitantes se dedican a la pesca y al turismo según la temporada, por lo que su sustento depende del acceso al mar y de la biodiversidad que en él hay.

Hasta hace 10 años, los pescadores desvaraban y estacionaban sus embarcaciones en la orilla de la playa Punta Arena, pero empezaron a robarles los motores. Después la empresa Península de los Sueños S. A. de C. V. cercó los terrenos colindantes a la playa y dejó solo dos accesos; se intensificó la vigilancia, implementaron plumas de control en uno de los accesos, y colocaron letreros de “propiedad privada” que advierten vigilancia satelital del sitio las 24 horas.

Todo eso sumado, hizo que los pescadores prefirieran otras playas para desvarar sus embarcaciones como Ensenada de Muertos y que las remolquen hasta sus casas. Sin embargo, ahora también les preocupa que con la construcción del proyecto se impacte una zona de gran biodiversidad y de importancia para las actividades que realizan de pesca y de turismo de naturaleza.

La empresa Península de los Sueños busca construir un complejo inmobiliario y turístico de 7 mil residencias; 7 mil cuartos de hotel; áreas deportivas y recreativas como campos de fútbol y de golf; un lago interior; áreas comerciales; una aeropista; clubes de playa; escuelas y parques; zona de viviendas para trabajadores; tres plantas desaladoras y una de tratamiento de aguas residuales; vialidades; sistema para abastecimiento de energía eléctrica; se trata de 3 mil 519 hectáreas de construcción.

Entre todo lo que plantea la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), lo que más preocupa a los pescadores y a Orgcas, una organización sin fines de lucro que trabaja con comunidades costeras para proteger el mar, es el impacto de la marina para el atraque de embarcaciones y de las plantas desaladoras a la biodiversidad marina.

El proyecto se ubica frente al canal que forma Punta Arena y la Isla Cerralvo. Este canal genera fuertes corrientes que atraen a muchas especies, lo cual ha sido confirmado a través del monitoreo que realiza Orgcas desde hace cuatro años en los alrededores de la Isla Cerralvo.

“Encontramos que es un área con una especial diversidad porque se encuentran varias especies que tienen una importancia a nivel mundial, especialmente, para mamíferos marinos es un área clave”, señaló Frida Lara, coordinadora científica en Orgcas.

En el canal entre Isla Cerralvo y Punta Arena se han registrado mamíferos marinos como ballenas azules, ballena gris, ballenas jorobadas adultas y juveniles, ballena de aleta, grupos de 100 cachalotes, delfines, cachalote pigmeo y orcas. Estas últimas utilizan la zona para crianza y para enseñar a cazar a sus crías.

“Por lo que he escuchado suena a un megaproyecto que va a ser el fin de la única zona virgen aquí y de la vida marina. A mí se me hace que la riqueza de la que vivimos se va a acabar”, señaló un pescador de Agua Amarga, que prefirió no ser identificado por temor a represalias.

El proyecto establece en la MIA que el total de la demanda de agua potable es de 6.53 millones de galones por día (MGPD). Para obtenerla, va a extraer 14.5 MGPD de agua salina del mar para potabilizarla. De ese proceso generarían 7.98 MGPD de salmuera concentrada que sería descargada al mar a 300 metros de la costa y a más de 20 metros de profundidad, según señala la MIA.

“Creen que la solución mágica son las desaladoras. La gran pregunta es qué va a pasar con el manejo de la salmuera, y no hay una respuesta muy clara de qué van a hacer con ella. Otra pregunta es que utiliza mucha energía, en una región donde la energía eléctrica es limitada y depende mucho del combustóleo que es contaminante”, señaló Lara.

El proyecto contempla la construcción de una marina de 446 posiciones de atraque en 62.6 hectáreas que tendrá un canal de navegación conectado con el mar. Su construcción requiere obras de estabilización con dos espigones de piedra, sobre uno de los cuales se construirá un malecón con una carretera y un desarrollo comercial, explica la MIA.

Su construcción y operación también es vista como un potencial riesgo a la biodiversidad, debido a que el dragado removerá el fondo marino y la instalación de escolleras y espigones impactaría la dinámica oceanográfica y de corrientes que implicaría cambios en la línea de costa y en las dinámicas de las especies marinas, de acuerdo con Orgcas.

Otro de los efectos de la instalación de una marina es que incrementaría el tránsito marítimo en la zona lo cual aumentaría el ruido y afectaría el comportamiento de las especies. Orgcas está próximo a colocar 10 hidrófonos en la zona para tener la información del estado actual del sitio y en caso de hacerse el proyecto, tener las pruebas de cómo aumentó el ruido y modificó la presencia de especies.

“Desde la construcción con el dragado van a cambiar la dinámica del agua de la zona y en la ejecución con el tránsito de yates también. Tener el monitoreo previo y el después para nosotros es muy importante y tendríamos cómo está hoy en términos de sonido en esa zona y cómo podría estarse afectando después”, señaló Lara.

Para Orgcas, proteger el ecosistema es cuidar todas las especies asociadas a la presencia de biodiversidad y a las comunidades que dependen de esas especies, ya que así como los pescadores de Agua Amarga, hay al menos otras cinco comunidades (El Sargento, La Ventana, Los Planes, Boca del Álamo y El Cardonal) que históricamente han dependido de la riqueza natural de esa área.

“Es un sitio icónico y que representa una derrama económica muy importante. Hacer cosas que no están bien diseñadas solo por un interés económico y sacrificando un ecosistema y a las comunidades que viven de él, no vale la pena. Si no tomamos medidas, si no estamos conscientes de la importancia que tiene ese lugar, si se modifica, no habrá retorno”, señaló Lara.

·        Resurgimiento y futuro del proyecto

Los Saguaros Marina Resort es el nombre de la fracción del proyecto con el que se empezó a relanzar a través de un video hecho público en julio de 2024 y que demostró que el proyecto se está reactivando.

“Es la fase 1 del desarrollo turístico de Península de los Sueños. Es la primera de 11 áreas. Con sus 220 hectáreas, la marina consta de un puerto deportivo con 332 atraques para yates de hasta 240 pies, club de yates con 43 atraques, áreas comerciales y un centro científico/de exhibiciones. Siete hoteles de lujo con villas y condominios y dos complejos residenciales”, señala el sitio web, donde se presenta el video, de la empresa Society of Floating Solution, dedicada a construcción de soluciones espaciales flotantes sustentables con sede en Singapur.

Además, en diciembre de 2024 abrieron nuevas redes sociales y anunciaron una residencia que tienen operando en el sitio.

Sin embargo, de acuerdo con el comisariado del Ejido San Vicente de los Planes, el proyecto enfrenta problemas con la tenencia de la tierra, lo que ha dificultado el avance de la construcción del proyecto.

“La empresa dice que 584 hectáreas que colindan con el Golfo de California son de ellos. Desde 1993 nos están peleando kilómetros de playa que nos dejaron nuestros ancestros y que ellos recibieron por decreto presidencial en 1968. Ahorita estamos nada más dependiendo de un amparo que se presentó ante la sentencia del Tribunal Superior Agrario que aún no se resuelve. Es lo único que nos queda ante este despojo”, señaló el comisariado.

Para este reportaje, Causa Natura Media contactó por diversos medios públicos a la empresa Península de los Sueños, pero hasta el momento de la edición no se ha tenido una respuesta de su parte.

“Creo que es importante que ellos (la empresa) estén conscientes que nosotros estamos informados y que sabemos el nivel de impacto que esto va a generar. Cuando se destruye un hábitat, no hay manera de que se recupere, y estos proyectos van a tener un impacto que jamás se va a volver a recuperar”, señaló Lara.

Por esta razón, Lara propone que se reconsidere la revocación de la autorización ambiental de este proyecto debido a que probablemente en aquel tiempo se aprobó sin mucha conciencia del impacto que podría tener en el futuro.

“Si lo intentan construir vamos a tratar de defendernos y de proteger el área hasta donde podamos, porque es el sustento y ha sido el sustento de generaciones en el pasado y a nosotros nos toca asegurarles un futuro a las generaciones venideras”, señaló el pescador de Agua Amarga.

*Este artículo se publicó originalmente en Causa Natura Media.