• El caso sobre Anastasio Hernández Rojas será parte del análisis para evaluar si Washington respeta los tratados internacionales de derechos humanos.
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Estado de México. - El caso del mexicano Anastasio Hernández Rojas, muerto a manos de
agentes de la Patrulla Fronteriza, será analizado por la ONU como parte de las
revisiones de la organización para establecer si Estados Unidos cumple o no con
sus obligaciones en virtud de los tratados de derechos humanos.
La Clínica de
Derechos Humanos de la facultad de Leyes de la Universidad de California
Berkeley y Alliance San Diego (ASD) dijeron este lunes que han presentado un
informe sobre la muerte del inmigrante con el que buscan exponer las graves
deficiencias que existen en el país en materia de derechos humanos.
Hernández
Rojas, un trabajador de la construcción que había vivido por más de 20 años en
EU, murió el 28 de mayo del 2010, después que más de una docena se oficiales de
la Patrulla Fronteriza lo golpearon en reiteradas ocasiones y lo sometieron a
múltiples descargas eléctricas.
El inmigrante
estaba esposado y sometido, con oficiales arrodillados sobre su cuello y
espalda mientras suplicaba por ayuda, como quedó grabado en al menos dos videos
captados por testigos.
La muerte de
Hernández Rojas fue clasificada por el médico forense como homicidio.
Este caso es
el primero en cuestionar el estándar estadounidense para el uso de la fuerza de
sus agentes migratorios bajo la propia perspectiva de “objetivamente
razonable”, destacaron los abogados de las organizaciones que representan a la
familia del inmigrante.
“Debido a
este estándar letal y deficiente, los agentes fronterizos estadounidenses
lograron salirse con la suya al golpear, patear, electrocutar y torturar
brutalmente a Anastasio (Hernández Rojas)”, agrega la nota de prensa, que
subraya que ningún agente involucrado ni sus superiores rindió cuentas.
La entrega de
pruebas a la ONU sobre el caso de Hernández Rojas se da en un momento en que el
Gobierno de Estados Unidos está ampliando las facultades de agencias como la
Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), la agencia de aplicación de
la ley más grande del país.
“Es más
importante que nunca dar testimonio del daño que se está causando y exigir
responsabilidades”, subrayaron los abogados en el comunicado.
Agregaron que
la muerte del mexicano deja claro que los derechos humanos no están
adecuadamente protegidos en EU.
El Consejo de
Derechos Humanos de la ONU analizará las pruebas presentadas como parte del
Examen Periódico Universal, un proceso al que deben someterse todos los estados
miembros de la ONU.
El caso del
Hernández Rojas actualmente es evaluado por la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos (CIDH), que, si bien no tiene facultad para sancionar al
Gobierno estadounidense, sí podría emitir un fallo en favor de los deudos del
inmigrante y formular una serie de recomendaciones para evitar que se repitan
incidentes de abuso policial en la frontera.
La ONU
emitirá un informe general en noviembre próximo, fecha en la que la CIDH ya
podría haber dado su veredicto.