La Paz, Baja California Sur.- Luego del fortalecimiento del huracán “Orlene” y posterior entrada a tierra en el estado de Sinaloa, se descartaron daños para Baja California Sur (BCS), pues el fenómeno no dejó ni lluvias en la entidad.

Sin embargo, se mantuvo activo el Consejo Estatal de Protección Civil de manera preventiva el sábado pasado, en caso de “algún desvío”, dijo el gobernador, Víctor Manuel Castro Cosío.

“Fue preventivo, toda la tendencia era y sigue siendo sostenida para que este huracán no llegara del todo. Pero todavía tenemos dudas, que tengamos reservas”, advirtió el mandatario.

“Porque cualquier desviación ahora sí nos va tocar de lleno, por eso convocamos hoy sin alarmismos inútiles, pero sí la preocupación y responsabilidad de estar a tiempo en los 5 ayuntamientos para ir preparando cualquier eventualidad”, agregó el mandatario sudcaliforniano

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Informes de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría de Marina (Semar) coincidían en su pronóstico “favorable” para costas de BCS, dejando de ser un peligro.

Pero destacó que su evolución y velocidad transcurrían “lento”, haciéndolo más problemático con 7 kilómetros por hora debajo de lo “tradicional”.

Informó que los 5 ayuntamientos de BCS estuvieron “conectados” y participaron en la labor de prevención ante las autoridades federales.

“Los 5 ayuntamiento del gobierno de BCS están conectados, agradecerles este sábado tomarse el tiempo, instituciones federales, Guardia Nacional, alcaldesas, alcalde, esto fue preventivo”, finalizó.