La Paz, Baja California Sur. La reforma energética aprobada recientemente por el Poder Legislativo Federal no afectará de manera directa la economía de los sudcalifornianos, pero sí aumentará el subsidio a la generación de energía que todos pagamos con nuestros impuestos, advirtió Jaqueline Valenzuela Meza, coordinadora del Centro de Energías Renovables y Calidad Ambiental (CERCA), quien lamentó que la “contrarreforma energética” cierre el paso a la generación privada de energía limpia en el país.

“Me parecía algo exagerado llamarlo una contra reforma, pero ahora, con las modificaciones que ha habido, podemos constatar que los cambios que se hicieron en 2013 a la Ley de la Industria Eléctrica, y que se operaron a partir del 2015, están teniendo una voltereta en la manera en que se despacha la energía”, expresó la experta en relación con las reformas recientemente aprobadas.

El nuevo marco normativo, explicó Valenzuela Meza, “cambió la prioridad en el despacho de la energía que se genera; antes se tenía la prioridad de que se debía comparar la energía que fuese más barata, independientemente de que fuese de privados o de la misma Comisión Federal de Electricidad, la nueva ley plantea que la energía que debe ser despachada con prioridad es la de la comisión”. Al despachar primero la energía que produce la paraestatal, “relega la generación de los privados a un lugar posterior al de la comisión”, planteó.

Los proveedores mayoristas de la industria en el país no dejaron esperar para presentar amparos constitucionales por lo que consideran prácticas desleales. “Lo amparos son por la falta de competencia que esta ley está impulsando”, planteó la especialista.

Mientras actualmente dos mayoristas que venden energía en el centro del país ya consiguieron el amparo constitucional para seguir con la provisión de energía con prioridad al sistema eléctrico, como lo habían acordado en contratos anteriores, la especialista desestimó que ello tenga un impacto directo en el usuario en el futuro próximo y descartó que este sea el caso del sistema aislado de generación en el estado.

“Lo que apunta es que a la Comisión Federal le va a costar más la energía, porque la energía que generan a partir de sus tecnologías no es la más barata, todo lo contrario”, expresó Valenzuela Meza. “La capacidad instalada fósil es más cara que las tecnologías renovables, a la Comisión Federal le va a costar más y no hay una competencia en donde el mercado mayorista la oferta más barata que la que se compra, y reporta rendimientos y ganancias para el distribuidor, que es la misma CFE” añadió. “La energía en México está subsidiada, no tiene el costo real que representa generarla”, recordó Valenzuela Meza, para indicar que ello “quiere decir que no nos va costar más la energía, lo que sucede es que los subsidios van a subir, y ahí es una relación indirecta porque las ganancias o utilidades van a verse mermadas y probablemente habrá que otorgar presupuesto de otros rubros para que siga operando, como ya ha pasado”.

La experta recordó, por ejemplo, que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció una condonación de impuestos a la CFE para que pudiera entrar a un esquema de recuperación económica.