San José del Cabo, Baja California Sur.- Al problema de baches en la ciudad, que causan serios problemas de movilidad e incluso riesgos para la población, se suman un sinfín de coladeras en mal estado cuya situación se ha ido agudizando con el paso del tiempo. 

Y es que hoy en día es común encontrar numerosas tapas o rejillas de conductos subterráneos deterioradas, y principalmente son los automovilistas quienes terminan pagando las consecuencias al sufrir daños en sus vehículos, que, por cierto, nadie responde por los mismos. 

A poco más de dos años de gobierno de la actual administración municipal, ha quedado en evidencia que no se ha tenido un proyecto que mitigue las malas condiciones en que se encuentran decenas de calles, además de la falta de inversión en infraestructura de saneamiento. 

La situación empeora aún más cada temporal de lluvias debido a que se registra la proliferación de baches y deterioro de las alcantarillas, agravando las afectaciones en la vida urbana. 

En lugar de aplicar acciones funcionales y responsables con recursos que año con año se autorizan para obra pública, muchas veces las autoridades recurren a soluciones parciales echando tierra a los agujeros o colocando improvisados señalamientos para “alertar” a peatones y automovilistas cuando existen coladeras abiertas. 

Resarcir problemas de movilidad provocados por alcantarillas en mal estado y baches no requiere de estudios complicados o grandes gestiones, sino de planeaciones, proyectos y voluntad de gobernantes, pues, si se habla de recursos, de que los hay, los hay.