La Paz, Baja California Sur.- Si bien dicen “condenar” la violencia, el gobierno de Baja California Sur (BCS) no mandó policías para resguardar el Congreso de personas ajenas, ni al Hotel Grand Plaza el pasado jueves, por una controversia interpuesta por este órgano para sacar a la fuerza pública del recinto.

El secretario general de Gobierno, Álvaro de la Peña Angulo, reiteró que la diputada Mercedes Maciel y “todos los diputados de Morena”, se inconformaron luego que fueran enviadas en marzo, ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

“No se hizo porque como debe saber, existe una controversia constitucional con motivo de esta situación, la propia diputada Maciel y todos los diputados de Morena, se inconformaron, existe esa parte, sigue integrándose”, dijo el funcionario estatal.

“Somos respetuosos del estado de derecho. El ente como Congreso, presentó una controversia. Si cualquier ciudadano solicita auxilio de la autoridad, ahí estaremos, es distinto”, señaló.

Explicó que este litigio “hay que respetarlo” ya que, podría inclusive perjudicar al Poder Ejecutivo, por “violar” una situación legal.

No obstante dijo condenar cualquier tipo de violencia, que se ha generado a lo largo del conflicto interno del Poder Legislativo.

“Nosotros nunca hemos apostado a la violencia, la confrontación. Al contrario, con acuerdos políticos, haremos todo lo que sea necesario para llegar a una solución pacífica”, señaló.

“Desaprobamos totalmente, no solo lo del jueves [Hotel Grand Plaza], sino otras situaciones de violencia física entre diputadas y diputados, no son las más adecuadas por ser representantes de la sociedad”, aseguró además.

Pidió públicamente a diputados llegar a un acuerdo de “coordinación política”, para que BCS continúe caminando hacia la “prosperidad” en estos tiempos de crisis sanitaria.

“No estamos para situaciones de conflicto tenemos que aportarle todos, hace reflexión y apostarle a que BCS siga caminando adelante”, finalizó.