San José del Cabo, Baja California Sur.- Dentro de la presentación que realizó el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (CIBNOR) sobre el Estero San José del Cabo, el investigador titular Enrique Troyo Diéguez, expuso que para elaborar el plan de manejo, es obligatorio tomar en cuenta estudios y referencias previas, como el plan maestro para el arroyo El Zacatal, realizado por un equipo de expertos de Texas, quienes hicieron una serie de planos y de integración ambiental; también hay un reporte de Conafor, del proyecto de la cuenca hidroforestal, hay tesis de licenciatura y posgrado del CIBNOR, un informe de Pronatura, entre otros. 

Aunado a lo anterior, destacó la importancia de basar las primeras acciones también tomando en cuenta los signos y señales como la basura doméstica en lechos de arroyo, que existe red de drenaje insuficiente, que se generan incendios, que dentro del núcleo del estero hay presencia de peces exóticos, el uso recreativo indiscriminado del estero y la poza Santa Rosa sin ninguna orientación y sin guías. 

“Nos tocó ver gente que lava su vehículo en la poza Santa Rosa a la vez que hay niños bañándose y a la vez que llegan derrames de aguas crudas, casi sin tratar, un riesgo de salud muy grande, hay que tomar en cuenta todos estos factores”, aseveró Troyo Diéguez. 

Al respecto de la preocupación que se ha externado de la agonía y muerte del Estero, difirió de estas opiniones, puesto que no sólo por imágenes de satélite, sino por visitas al humedal, han visto que a través de los años se llena y se vacía, “en el 2011 estaba vacío y luego venimos después de Odile y bien lleno de agua y de pronto ya vegetación reestablecida, hay todo un ciclo que hay que descubrir […] terminamos viendo que a través de los años se seca y luego se recupera y así sucesivamente”, puntualizó. 

Sin embargo, el investigador titular del CIBNOR, dijo es definitivo que el estero ha perdido masa, eso desde finales de los setentas y principios de los ochentas, cuando se colocó el primer hotel exactamente en una de sus entradas, que desde entonces comenzó a alterar las condiciones y por lo que ante la realidad de que él hubiera no existe, llamó a establecer en lo inmediato un cerco y vigilancia en el núcleo del Estero. 

“Porque estamos causando mucho debate por toda la poligonal cuando esto es impráctico, debe ser el núcleo del estero y la poza Santa Rosa”, concluyó Enrique Troyo.