La Paz, Baja California Sur.- Fue el 23 de diciembre de 1975 cuando, mediante el oficio 1596, el Lic. Ángel César Mendoza Arámburo, Primer Gobernador Constitucional del Estado de Baja California Sur, solicitó al H. Congreso del Estado asistir a la sesión que se celebraría tres días después, con el propósito de leer y fundamentar personalmente el contenido del proyecto de Ley para la creación de la Universidad.

Después de ser analizado, suscrito y firmado por los legisladores en los días subsecuentes, el 31 de diciembre del mismo año sería publicada en el Boletín Oficial del Gobierno del Estado, la Ley Orgánica de la UABCS, bajo el decreto No. 35.

Para febrero de 1976, el H. Consejo Universitario Constituyente, integrado por Francisco Palacios Ceseña, Óscar Amador Soto y David Peralta Osuna, nombró al Arquitecto Tomás Balarezo Cota como primer Rector de la Universidad. 

Formalmente la casa de estudios iniciaría su actividad académica hasta el 15 de marzo de 1976, con un primer tronco común interdivisional integrado por cuatro grupos, con un total de 220 alumnos y 4 profesores.

Al día de hoy, la casa de estudios sudcaliforniana tiene una matrícula de más de 7 mil alumnos, cuenta con 9 departamentos académicos que ofrecen 31 licenciaturas y 11 posgrados; así como una gran variedad de programas de educación continua, servicios educativos y actividades extracurriculares. Además tiene presencia en los cinco municipios del estado, donde cuenta con instalaciones de primer nivel.

“La universidad ha aportado a miles de profesionistas que, ya sea desde diferentes espacios de decisión públicos o desde la iniciativa privada, han contribuido al desarrollo económico, político y social de Baja California Sur”, destacó el Rector Gustavo Cruz Chávez, al subrayar la trascendencia que ha tenido la UABCS en estos 43 años.

Aseguró que le ha tocado conocer a la universidad desde adentro, primero como estudiante, y luego como profesor-investigador, administrador y personal directivo, lo que lo hace ser un orgulloso “Gato Salvaje” en toda la extensión de la palabra.

Dijo sentirse satisfecho por el trabajo que la comunidad universitaria ha realizado en los últimos años para fortalecer las tareas sustantivas, ya que una institución con estas características no podría haberse consolidado en tan poco tiempo sin el apoyo, la solidaridad y el compromiso de alumnos, trabajadores y de la sociedad misma.

Gracias a ello, los sudcalifornianos tienen la posibilidad de acceder a una educación superior de calidad sin la necesidad de trasladarse a otros estados de la república, algo a lo que le estarán eternamente agradecidos los universitarios a Don Ángel César, quien tuvo esa visión de mundo para saber que era imperativo que BCS tuviera su propia universidad.

Por ello hizo patente su compromiso y el de toda la comunidad universitaria para seguir fortaleciendo ese lugar universal, plural y abierto a la crítica constructiva; ese espacio de donde provienen ideas innovadoras que aportan al desarrollo social; ese hogar para miles de jóvenes que buscan en la educación profesional, un futuro mejor.