La Paz, Baja California Sur.- A poco más de un mes que se ampliara el polígono en Golfo de Ulloa para preservar la vida de tortugas amarillas (Caretta Caretta) donde supuestamente se prohibía la pesca para reducir su mortandad, el cuerdo que estableció la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) señala normativas para esta actividad más no su prohibición. 

El acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación el 5 de junio de este 2018, señala ciertas limitaciones dentro de las áreas  de anidación y distribución frecuente de estas tortugas marinas, como son vedas permanentes o temporales, adecuación de las artes de pesca y en la medida de lo posible, la restricción de cierto tipo de embarcaciones, más no la anulación de la pesca por completo.

En junio 23 del 2016 la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) a través de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) estableció un polígono como zona de refugio pesquero así como algunas medidas para reducir la perca de tortugas marinas en Golfo de Ulloa, estableciendo en su fracción II que no se podía postergar la adopción de dichas medidas señaladas.

La ampliación de esta área de refugio de Caretta Caretta se focaliza frente a las costas de los municipios de Mulegé y Comondú y se incrementó a una superficie de 1,989,390 hectáreas y la cual queda a cargo de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas de la Semarnat, misma que desde el 5 de junio de la nueva publicación en la federación, tendrá 180 días naturales para elaborar un nuevo programa de protección.

A pesar de que el acuerdo que se emitió desde el 2016 marca que muchas artes de pesca estaban causando un impacto negativo en la tortuga marina, la cual se colocó dentro del catálogo de especies en extinción; sus artículos 79 fracción I y III así como el 83 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, señalan la  necesidad de establecer cómo se daría el aprovechamiento sustentable de los recursos, sin que ello perturbara la evolución de la especie.

Siendo así, el reciente acuerdo recalca que debido al incremento del polígono, se deberán señalar las condiciones de conservación y manejo de actividades que se lleven a cabo en el área de refugio, para que de esta forma los especímenes jóvenes que se encuentren en la zona cumplan sus ciclos antes de viajas a Japón, donde al mismo tiempo permita que los pescadores puedan continuar la producción sin afectar a esta tortuga u otra.