Los Cabos, Baja California Sur.- En nuestro Gobierno vamos a construir una segunda planta desaladora pero bajo un esquema diferente de pago, donde no se tengan que comprometer los recursos hasta por 20 años del organismo de agua o del Ayuntamiento, expresó el candidato del Partido del Trabajo a la Presidencia Municipal de Los Cabos Ernesto Ibarra Montoya. 

El Doctor Ernesto Ibarra está a favor de la construcción de una segunda planta desaladora que resuelva el déficit de agua que se tiene en el municipio y de manera particular en el puerto de Cabo San Lucas, en lo que no estamos de acuerdo es en comprometer las participaciones federales que pongan en riesgo la operación financiera del Ayuntamiento o del organismo de agua, dijo. 

A diferencia del actual Gobierno, el candidato del Partido del Trabajo sostuvo que con la recuperación del impuesto al valor agregado que se paga a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, así como con la recuperación de la cartera vencida del OOMSAPASLC que asciende a más de 400 millones de pesos, el Ayuntamiento estaría en condiciones de aportar el 51% para la construcción de la planta desaladora, el otro 49% lo aporta la Federación a fondos perdidos. 

Tenemos la plena seguridad de que el 01 de julio tendremos el respaldo ciudadano en las urnas y una de nuestras primeras tareas como Gobierno será auditar la producción de agua e identificar a donde se va el 40% por ciento que actualmente el OOMSAPASLC reporta como perdida. 

De igual forma vamos a exigir que PROMAQUA cumpla con la producción de los 200 litros por segundo que debe entregar de a planta desaladora de Los Cangrejos, siempre hay un pretexto para no cumplir pero el pago lo tienen de manera puntual. 

En Los Cabos existen los huachicoleros del agua y lo vamos a descubrir, asimismo vamos a acabar con el gran negocio que algunos piperos tienen con la venta de agua en colonias y fraccionamientos del puerto de Cabo San Lucas, dijo Ibarra Montoya. 

Todos esos vicios se tienen que acabar, porque nuestra prioridad será dar agua de manera continua a las familias de todo el municipio, no como actualmente ocurre, que tardan hasta 30 días en tener el vital líquido los sanluqueños, cuando les llegan tienen que decidir entre bañarse, lavar los trastes o su ropa. Todo eso se tiene que acabar, afirmó el abanderado petista a la presidencia municipal.