La Paz, Baja California Sur (BCS).- Para el Partido Encuentro Social (PES) no ha sido fácil legitimar su lucha en contra de los “políticos corruptos” cuando han sido señalados por militantes y ex militantes de nepotismo.

Señalan nepotismo al interior del PES

De acuerdo con un informe en poder de esta redacción, la presidente del partido de nueva creación con bases religiosas, Perla Guadalupe Flores Leyva, ha entregado el partido a su familia y desplazado a ex candidatos del proceso electoral, sobre todo si estos no están de acuerdo en su matriarcado. Por citar un ejemplo, Flores Leyva, quien además de ser presidente del PES es regidora en el XV Ayuntamiento de La Paz, permite que sea su esposo quien tome las decisiones finales en el partido y por lo tanto dentro del Cabildo de La Paz. De acuerdo con la nómina del personal, esta dirigente ha empleado a Gustavo López Avilés -esposo- como secretario adjunto a Presidencia en BCS. Asimismo, nombró a su hijo, Jean Ortega Flores, coordinador estatal de Jóvenes y a Juan Ramón Domínguez Leyva, responsable de la Comisión de Organización y Estrategia Electoral. De igual forma se ha identificado a dos familiares más, el primero de ellos es Jesús Leyva, encargado de la Comisión Política y a Marbella Saiza Cota, una cuñada. La posición de estas personas, quienes gozan de un sueldo y no todos fueron parte del proceso electoral donde el PES logró mantener su registro en BCS, ha generado controversia, a tal grado que, Carlos Zambrano, jurídico del partido, se encuentra asesorando al ex dirigente del PES, Yhassir García Pantoja, para la conformación del partido BCS Coherente, donde ahora se refugian las personas que Leyva Flores “despidió”.

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