El fenómeno meteorológico podría causar lluvias e incendios en la entidad
El Sistema Estatal de Protección Civil implementa medidas preventivas y mantiene un monitoreo constante en Chiapas ante la información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) sobre la evolución del fenómeno El Niño de una etapa moderada a intensa.
En un comunicado, la dependencia comentó que debido a esa situación se pronostican lluvias escasas e incendios forestales en la entidad.
Explicó que según los reportes de la Conagua, para este 2015 se prevé que en la entidad éste fenómeno se intensifique, e incluso se supere el dato histórico del periodo de 1997-1998, cuando se registró el mayor número de incendios.
También señaló que las primeras manifestaciones de El Niño han comenzado a ser perceptibles a nivel estatal, ya que del 1 de enero al 25 de agosto ha habido una lluvia promedio mensual acumulada de 822.5 milímetros, un 35.5 por ciento por debajo de lo normal, pues en años anteriores había sido de mil 275.9 milímetros.
De acuerdo con el reporte, el fenómeno El Niño es un patrón climático que implica cambios en la temperatura de las aguas en la parte central y oriental del Pacífico tropical.
En períodos que van de tres a siete años, las aguas superficiales de una gran franja del océano Pacífico tropical, se calientan o enfrían entre uno y tres grados centígrados, en comparación con el normal.
Este calentamiento oscilante, conocido como el ciclo ENOS o ENSO por sus siglas en inglés, acompañado de débiles vientos alisios del Este, afecta directamente las precipitaciones en las zonas tropicales, así como cambios en el clima en otras partes del mundo.
Ante esto, cuando la temperatura superficial en el océano Pacífico incrementa, en el sur de América pueden presentarse lluvias intensas o inundaciones, mientras que para América Central se presentan episodios de sequías severas.
La fase cálida de El Niño suele durar aproximadamente entre ocho y 10 meses, y su ciclo no se presenta de manera periódica, sino que lo hace de manera irregular, cada dos a siete años.