BUDAPEST, 5 de septiembre.— Cientos de inmigrantes dejaron Hungría y emprendieron una caminata con dirección a una localidad en la frontera con Austria. Luego de horas de caminata, Hungría envió decenas de autobuses para ayudarlos a llegar a Alemania. Mientras, Austria y Alemania aceptaron acoger a centenares de migrantes bloqueados desde hace días en Hungría, aumentando la presión para que la Unión Europea halle una respuesta a la profunda crisis migratoria. La decisión, motivada por “la actual situación de emergencia en la frontera húngara”, fue anunciada al primer ministro húngaro, Viktor Orban, por el canciller austriaco, Werner Faymann, en concertación con la canciller alemana, Angela Merkel, precisó la Cancillería austriaca a la agencia APA. En Lisboa, el primer ministro británico, David Cameron, anunció que Gran Bretaña está dispuesta a acoger a “miles de refugiados sirios adicionales”. Londres otorgó protección a 219 sirios durante el último año y medio. “Frente a la magnitud de la crisis y el sufrimiento de la gente, puedo anunciar que haremos más, acogiendo a miles de refugiados sirios adicionales”, declaró. La misma postura mostraron España y Checoslovaquia, que expresaron su disposición a dar refugio a las personas que intentan salir de sus países para librar la guerra o el hambre. Miles de personas han muerto en el mar y durante sus viajes por tierra, en la peor crisis de migración desde la guerra de la ex-Yugoslavia en la década de 1990. El arribo de inmigrantes ha puesto bajo presión el sistema de asilo de la Unión Europea hasta su punto de quiebre, generando divisiones entre las 28 naciones del bloque y ayudando a fortalecer a los grupos populistas de derecha. Los países más influyentes de la UE han tomado posturas profundamente opuestas sobre cómo recibir a los inmigrantes. Alemania planea aceptar 800 mil refugiados este año, mientras que Gran Bretaña inició un programa para permitir la entrada de sirios. “Como uno de los países más ricos del mundo, con una buena infraestructura, un estado de bienestar viable y un sólido superávit de presupuesto, estamos a la altura de las circunstancias”, dijo Andrea Nahles, ministra alemana de Trabajo y Asuntos Sociales, antes de una reunión del G20 ayer en la capital turca. Un comunicado de la Presidencia francesa dijo que su país y Alemania realizarán propuestas conjuntas para albergar refugiados y distribuirlos de manera justa a lo largo de Europa. Poco respaldo Mientras Europa se debate en el escándalo ante su limitada respuesta a la crisis de migrantes africanos y sirios, las naciones árabes más ricas han hecho poco por ellos, se quejaron grupos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch. En algunos casos, como el de los países de la península arábiga y el Golfo Pérsico, están geográficamente más próximas a Siria e Irak que los países europeos, destacó The Washington Post. “Algunos países europeos han sido criticados por ofrecer albergue sólo para un pequeño número de refugiados, o por discriminar a musulmanes. Ha habido una gran angustia continental sobre la disfunción general de los sistemas de Europa para la migración y el asilo”, indicó el diario. El punto, añadió, es que “menos ira ha sido dirigida contra otro grupo de interesados que casi ciertamente deberían hacer más: Arabia Saudita y los ricos Estados árabes a lo largo del Golfo Pérsico”. Los seis países del golfo (Arabia Saudita, Kuwait, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Omán y Bahréin) “han ofrecido cero sitios de reasentamiento para los refugiados”, indicó Amnistía Internacional. “¿Adivinen cuántos refugiados sirios han ofrecido aceptar Arabia Saudita y otros Estados árabes? Cero”, acusó Kenneth Roth, director ejecutivo de Human Rights Watch. SEPULTAN AL NIÑO AYLAN El padre del niño sirio de tres años ahogado en Turquía regresó ayer a Kobane, en Siria, para enterrar a su familia. Abdulá Kurdi acompañó la caravana que trasladó los féretros de Aylan, de tres años, su hermano de cinco y su esposa de 27 desde la playa turca de Bodrum hasta la ciudad siria de Kobane. Los tres fueron enterrados en un emotivo funeral, afirmó un testigo. La imagen del niño sirio Aylan Kurdi, de 3 años, muerto en una playa de Turquía, se convirtió en un poderoso símbolo y una formidable herramienta de presión sobre los países de la Unión Europea, divididos sobre cómo encarar la crisis migratoria. El bloque está dividido sobre cómo responder al flujo de refugiados, que desborda las infraestructuras. “Se trata ante todo de una crisis de refugiados, y no sólo de un fenómeno migratorio”, dijo el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, Antonio Guterres, afirmando que la gran mayoría de los que llegan a las costas de Grecia proceden de países en conflicto, como Siria, Irak y Afganistán.   FUENTE: http://www.excelsior.com.mx/global/2015/09/05/1044068#imagen-2